miércoles, 13 de mayo de 2009


Las Peticiones.





Dios es todopoderoso, lo sabe todo, en todo lugar esta y nada está fuera del alcance de su poder. Esta idea la tenemos muy clara, sin embargo a veces confiamos en la omnisciencia de Dios y pensamos que Dios nos conoce y nos proveerá lo necesario. Sin embargo, si bien Dios conoce nuestros deseos y pensamientos debemos recordar que de igual forma el es un Dios activo, el cual no se manifiesta solo por fe sino con hechos, siendo que Dios nos invita a actuar pidiéndole lo que deseamos.
Pidan y se les dará:

Mateo 7:8 (Nueva Versión Internacional)
7 »Pidan, y se les dará; busquen, y encontrarán; llamen, y se les abrirá.8 Porque todo el que pide, recibe; el que busca, encuentra; y al que llama, se le abre. 9 »¿Quién de ustedes, si su hijo le pide pan, le da una piedra?10 ¿O si le pide un pescado, le da una serpiente?11 Pues si ustedes, aun siendo malos, saben dar cosas buenas a sus hijos, ¡cuánto más su Padre que está en el cielo dará cosas buenas a los que le pidan!12 Así que en todo traten ustedes a los demás tal y como quieren que ellos los traten a ustedes. De hecho, esto es la ley y los profetas.
Lucas 11:9-11 (Nueva Versión Internacional)
9 »Así que yo les digo: Pidan, y se les dará; busquen, y encontrarán; llamen, y se les abrirá la puerta.10 Porque todo el que pide, recibe; el que busca, encuentra; y al que llama, se le abre. 11 »¿Quién de ustedes que sea padre, si su hijo le pide[
a]un pescado, le dará en cambio una serpiente?

El pedir implica una subordinación o un reconocimiento de que la persona a quien pedimos tiene el poder de concedernos nuestra petición, por lo cual el acto de pedir significa que quien pide, deja su ego y orgullo de lado para realizar la petición de forma sincera. Cuando realizamos una petición de forma sincera es más probable que esta nos sea otorgada, contrario el caso de las peticiones sin humildad, estas son repudiadas.
Pedir humilde y sinceramente:
Santiago 4 (Nueva Versión Internacional)
1 ¿De dónde surgen las guerras y los conflictos entre ustedes? ¿No es precisamente de las pasiones que luchan dentro de ustedes mismos?[a]2 Desean algo y no lo consiguen. Matan y sienten envidia, y no pueden obtener lo que quieren. Riñen y se hacen la guerra. No tienen, porque no piden.3 Y cuando piden, no reciben porque piden con malas intenciones, para satisfacer sus propias pasiones.
Ahora bien, hay diversos tipos de peticiones, sin embargo debemos reconocer que solo Dios es capaz de otorgarnos aquello que deseamos con un corazón humilde, siempre y cuando esto sea su voluntad; si Dios tiene algo para nosotros hay que saber aceptar su voluntad con mucha fe. Una vez Nabucodonosor, poderoso rey de los persas, tuvo un sueño que le preocupo y lo afligió, y pidió a todos sus sabios y sus magos que descifraran su sueño, a lo que estos le responden:
Incapacidad humana de conceder las peticiones de naturaleza igualmente humana:

Daniel 2 (Nueva Versión Internacional)
—¡No hay nadie en la tierra capaz de hacer lo que Su Majestad nos pide! ¡Jamás a ningún rey se le ha ocurrido pedirle tal cosa a ningún mago, hechicero o astrólogo!11 Lo que Su Majestad nos pide raya en lo imposible, y nadie podrá revelárselo, a no ser los dioses. ¡Pero ellos no viven entre nosotros! (Pero DIOS si nos escucha)
Podemos ver que no importa cuánto poder o sabiduría puedan tener (o Llegar a tener los hombres), solo DIOS tiene el poder absoluto para conceder nuestras peticiones, puesto que para él no hay nada imposible ni oculto.
Ahora surge una interrogante ¿Cómo debemos pedir a Dios? Al respecto, la biblia nos señala que Dios escucha nuestras peticiones a través de nuestra arma más fuerte, La Oración.
Filipenses 4:5-7 (Nueva Versión Internacional)
5 Que su amabilidad sea evidente a todos. El Señor está cerca.6 No se inquieten por nada; más bien, en toda ocasión, con oración y ruego, presenten sus peticiones a Dios y denle gracias.7 Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, cuidará sus corazones y sus pensamientos en Cristo Jesús.
Efesios 6:17-19 (Nueva Versión Internacional)
17 Tomen el casco de la salvación y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios. 18 Oren en el Espíritu en todo momento, con peticiones y ruegos. Manténganse alerta y perseveren en oración por todos los *santos.
Hay algo que debemos comprender, y es que todos formamos parte de Dios, el cual nos ha aunado en su fe y nos pide que nos amemos unos a otros, siendo que no solo debemos ser humildes, sino que debemos dejar nuestro egoísmo a un lado y pedir por nuestros hermanos, demostrando así que le amamos como a nosotros mismos, considerándole en nuestro momento intimo con DIOS.
Efesios 4 (Nueva Versión Internacional)
4 Hay un solo cuerpo y un solo Espíritu, así como también fueron llamados a una sola esperanza;5 un solo Señor, una sola fe, un solo bautismo;6 un solo Dios y Padre de todos, que está sobre todos y por medio de todos y en todos. 7 Pero a cada uno de nosotros se nos ha dado gracia en la medida en que Cristo ha repartido los dones
… 25 Por lo tanto, dejando la mentira, hable cada uno a su prójimo con la verdad, porque todos somos miembros de un mismo cuerpo.
Efesios 6:17-19 (Nueva Versión Internacional)
17 Tomen el casco de la salvación y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios. 18 Oren en el Espíritu en todo momento, con peticiones y ruegos. Manténganse alerta y perseveren en oración por todos los *santos. 19 Oren también por mí para que, cuando hable, Dios me dé las palabras para dar a conocer con valor el *misterio del evangelio,

Salmos 20:4-5 (Nueva Versión Internacional)
4 Que te conceda lo que tu *corazón desea; que haga que se cumplan todos tus planes. 5 Nosotros celebraremos tu *victoria, y en el nombre de nuestro Dios desplegaremos las banderas. ¡Que el Señor cumpla todas tus peticiones!
Por eso, recordemos a todos nuestros hermanos y pidamos a Dios que haga su voluntad con respecto a las peticiones que estos tengan.
Esteban Pastrana

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